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Mi experiencia en YWAM Perth

Bitácora de Viaje. Capítulo 2


Este es el segundo de la serie de correos con las que inicié a redactar viajes hace 5 años y que estaré publicando en este blog para dar inicio a esta bitácora y poder seguir agregando capítulos. Explico un poco respecto a eso en el siguiente link:



Perth es una ciudad de aprox. 1 millón 800,000 habitantes y es la ciudad más grande de Western Australia (WA), un estado un poco más grande que México en territorio ¡Australia es enorme! Aunque suena una cantidad pequeña comparada con otras cuidades, es más de la mitad de la población en ese estado. Económicamente es la cuidad más importante de toda Australia; más que Sydney.


Llegué a Perth en la noche, unos tres días antes de que el programa que estoy tomando comenzara. Me recogió un grupo del staff de Jucum (Juventud con una misión y YWAM en inglés. YWAM es una organización cristiana que moviliza a los jóvenes en diferentes áreas de ayuda comunitaria e intervención social). También recogieron a mas chavos que iban a la misma base que yo.  Nos fuimos conociendo en el trayecto y descubrí que algunos de ellos iban en mi vuelo. Nos dejaron a mí y a una chica de Noruega llamada Trine (se pronuncia Trina) y con la emoción y todo no pudimos dormir, así que exploramos la casa que sería nuestro hogar por los siguientes tres meses. Reímos, escogimos una cama en el cuarto que tenía espacio y platicamos por horas en la sala. no lo sabíamos, pero ese fue el inicio de una gran amistad. (-Cinco años después seguimos siendo mejores amigas-)




La vida en la casa ha sido interesante, somos ocho niñas y un hombre. "Bendito entre las mujeres" diría mi abuela. En realidad es esposo de una de las chicas. Es un pan. Ya está más que acostumbrado a toda la femineidad que corre por la casa. Al principio se espantaba de vernos en ropa interior, o de que habláramos de temas muy explícitos, pero, con el tiempo, dejó de ponerse nervioso y simplemente se tapaba los ojos cuando alguna de nosotras corría del baño a su habitación, o comenzó a comentar y opinar sobre nuestras cuestiones más íntimas. Era muy divertido tenerlo, porque eventualmente hubieron romances entre nosotras y los chicos y él nos aconsejaba o nos regañaba cuando era necesario.

Casi cada semana, hacíamos "girls night" que constaban de sentarnos en el sillón, comprar mucho chocolate, Tim Tams (las galletas más deliciosas del mundo) y Milo (chocolate en polvo para la leche). Cada quien hacía una pregunta que todos debían contestar. Eran preguntas de todo tipo, por lo que llegamos a conocernos muy bien y llevarnos increíble entre todes. También de repente hacíamos fiestas, pero, en general, preferíamos convivir solo entre nosotros. Surgió un ambiente muy bonito y muy unido. Eso sí, nos la pasábamos cocinando juntos y comiendo juntos. (-Regresé de ese viaje con 10 kilos de más-)

Volviendo al inicio, los siguientes tres días me la pase conociendo alrededor; caminando. Yo siempre he pensado que las ciudades se conocen a pie. Descubrí que hay un lago detrás de mi casa y un río que está rodeado de parques y vistas hermosas si caminas a la orilla en cualquier dirección. Todos los días me iba a correr temprano disque para prepararme para lo que venía. Conocí lugares interesantes, cafeterías, teatros, escuelas, etc. Hay una prisión Museo muy interesante junto a la playa y calles muy bonitas. Personas interesantes también, la gente aquí es muy amable y te habla sin motivo alguno, sólo para conversar (¿o soy yo la que habla sin motivo?), el punto es que eso facilita mucho relacionarse.

Un día me sentía medio enferma así que me quede en cama toda la mañana, y en la tarde salí a comer porque no había nada interesante en el refrigerador. En mi búsqueda del mejor lugar, encontré un campo de golf con una cafetería y música country en vivo. Pedí mi comida y me fui a sentar para disfrutar de la música en medio de mi enfermedad. El lugar era bastante local y lleno de viejitos que se conocen entre sí y seguramente van cada domingo a la misma hora, así que fácilmente reconocieron que no era de allí. Al verme sola y enferma, me invitaron una bebida y en no más de diez minutos ya estaba sentada en la mesa rodeada de viejitos (y viejitas) australianos que trataban de integrarme y ayudarme a entender su cultura y también muy interesados en la mía (soy la primera mexicana que muchos aquí conocen. Ha sido interesante, casi nadie viene hasta acá). Fue una experiencia bastante placentera, a pesar de que no me sentía muy bien. Así de ligeros y amables son los australianos.



Perth es una ciudad diminuta comparada con el DF, pero hay mucho que hacer y muchas cosas muy interesantes. Es bastante dinámica. Se ve el "1er mundo" fácilmente. El transporte es caro, pero al mismo tiempo es eficiente, y, si sabes moverte bien, es gratis tomando las lineas correctas hasta ciertos puntos. Hay muchas playas muy bonitas y encuentras playas vacías y salvajes a sólo 20min en tren. Hablo en serio con lo salvajes, por arriba se ve muy calmada el agua, pero abajo te revuelca. Yo casi me rompo la espalda algunas veces intentando "surfear".

Descubrí un lugar con sillones al aire libre y... ¡un piano! (medio viejo y desafinado, pero algo es algo) y todos los viernes a partir de las 6:00 pm había música al aire libre de diferentes géneros, super relax y super padre. Ese se convertiría mi lugar favorito de la ciudad. Mi escape. También hay un parque llamado Kings Park (el parque más grande en medio de una ciudad, más que el Central Park y el bosque de Chapultepec) al que iríamos a ver el atardecer varias veces, ese lugar también se volvió especial.

La primera vez que vi un canguro fue en una reserva en medio de la ciudad, caminamos un rato, los encontramos comiendo y durmiendo y nos tomamos fotos con ellos. Son super tranquilos y se dejan abrazar y tocar muy fácilmente. De este lado del país son más pequeños y tiernos, pero en el este son mas grandes que un humano y, por lo que he oído y visto en videos de gente boxeando con ellos, más agresivos. En la cuarta semana, fuimos a acampar a Margaret River, a unas cuantas horas en camión. Un lugar Asombroso y hermoso. Una noche salí a caminar con Trine en la oscuridad, recorrimos unos cuantos metros dentro del bosque y de repente vimos una sombra. Nos asustamos bastante. Agarramos valor y tratamos de descubrir si era una persona o un perro o algún ser salvaje que podría matarnos, porque se movía muy rápido y en cuanto volteábamos dejaba de moverse. Nos acercamos un poco y descubrimos que era un canguro, caminamos un poco más y vimos que no era uno si no dos canguros, prendimos la linterna y vimos que estaban bastante molestos de que los interrumpiéramos. Nos veían fijamente diciendo "Buegger off" (El australiano para "fuera de aquí") con la mirada. Nos fuimos riendo y los dejamos en lo suyo. El punto es que una escena bastante terrorífica se tornó en algo muy gracioso y aunque no esperaba ver algo así ahora puedo decir que he visto canguros en su hábitat natural.




Sobre el programa que estoy tomando:

Es un voluntariado de seis meses, tres en una ciudad y tres en medio de la nada, bueno, no siempre, pero en mi caso sí. Nepal e India son los destinos de la segunda parte del curso, y es en medio de la nada porque, por alguna extraña razón, escogí de entre todas las opciones, la que va a los lugares más remotos y complicados, y, al ser remotos, significa que sólo puedes llegar a pie. No sé que me hizo pensar que subir y bajar montañas con 15 kg en la espalda sería para mí, pero he sobrevivido hasta ahora y no cambiaría nada en ningún aspecto, he visto cosas que jamás olvidaré (pero eso cabe en otro correo). Aún así,  definitivamente no tenía idea de mi falta de condición, mi limitada complexión y musculatura, y de lo difícil/increíble que sería. La mayoría de nosotros omitimos esos pequeños detalles, eso ha sido lo divertido también. Ver como todos sufrimos casi por igual. Me atrevería a decir que si sufro un poco más que todos. Mamá, si estás leyendo esto, estoy bien, tu no te preocupes.

Básicamente, los primeros tres meses te preparan para los siguientes tres. Es bastante intenso en todos los aspectos, diferente a lo que pensaba pero valió mucho la pena. Los otros tres meses son de ayuda comunitaria, y evangelismo, aunque suele haber algo definido, en realidad siempre cambian los planes, porque dependemos mucho de la comunidad y de las necesidades inmediatas que tengan: llegas al lugar, ves la necesidad y la cubres de la manera que puedas. En realidad, nuestro trabajo es de prevención y canalización, desde entrega de medicamentos, construir escuelas o casas, hasta obras de teatro o clases de inglés para los niños, leer cuentos e historias, etc. De todo, cosas simples o complicadas. Si los primeros tres meses son intensos, esta segunda parte ha sido el triple de intenso, al grado en el que han pasado tan sólo 8 días y he vivido y visto más cosas de las que jamás creí que viviría. Mi curso es de 22 personas, 18 estudiantes y 5 staffs, bastante parejo entre mujeres y hombres; ni mucho drama ni mucha acción. Equilibrio aventurero. 4 canadienses, 3 alemanes, 3 australianos, 2 estadounidenses, 2 suizos, 1 de Burma, 1 holandesa, 1 filipino, 1 noruega y una mexicana ;) .



Después nos dividimos en equipos de 10 para ir a las villas más pequeñas. Y nos reunimos de nuevo cada tres semanas para retroalimentación, víveres y abastecernos de lo que sea que vayamos a ocupar en la siguiente comunidad. Repito, todo esto en nuestras mochilas. (-Al final me deshice de la mitad de lo que llevaba. Te das cuenta de que no necesitas gran parte de las cosas que crees necesitar. Por Dios, ¿quién lleva un perfume a los Himalayas? RIP mi perfume.-)

En fin, podría hablar de lugares, pequeños momentos y personas que te regalan recuerdos para toda la vida, incluso de convivir un día. Rostros que no olvidarás jamás, e historias de gente extremadamente fuerte y amorosa. Pero el punto era darles una idea del lugar en el que estoy viviendo, de la ciudad en la que viví y de la gente que forma parte de esta experiencia también.

Les mando un enorme saludo, sigan al pendiente y gracias por todo su apoyo e interés.

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